El presidente Gustavo Petro sancionará el 2 de julio la reforma pensional, según lo anunció la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez.
Este paso marca la culminación de un proceso legislativo extenso y controvertido, que ha suscitado un amplio debate nacional. La ministra destacó que esta reforma se basa en la solidaridad intergeneracional, alejándose del modelo de capitalización individual que, según ella, beneficia principalmente a grandes conglomerados.
La reforma ha enfrentado críticas y desafíos legales. El exvicepresidente Germán Vargas Lleras afirmó que la aprobación de la reforma violó el reglamento del Congreso, y varios congresistas han señalado que la Cámara de Representantes omitió el último debate, lo que podría llevar a demandas ante la Corte Constitucional.
Sin embargo, la ministra Ramírez expresó su confianza en que la Corte mantendrá el interés y los beneficios de la reforma, subrayando su carácter inclusivo y equitativo.
Entre las principales características de la reforma se encuentra la creación de un Sistema Integral de Protección a la Vejez, administrado por Colpensiones.
Este sistema busca resolver problemas de competencia entre los regímenes pensionales actuales, eliminando los grandes subsidios a las altas pensiones y aumentando la cobertura de protección a la vejez.
En el primer año, la cobertura se incrementará del 24 % al 53.73 %, beneficiando a aproximadamente 4.662.000 personas, con una proyección de alcanzar el 87 % en 2052.
La reforma también incluye medidas para eliminar la pobreza extrema en la población mayor y mejorar las oportunidades de pensión para las mujeres, reconociendo su dedicación al cuidado de los hijos y eliminando las disparidades de género en las mesadas.
Además, establece un umbral de 2.3 salarios mínimos mensuales legales vigentes para cotizar a Colpensiones, contribuyendo a la sostenibilidad del sistema pensional.
La ministra Ramírez concluyó que esta reforma representa un avance significativo hacia un sistema más justo y solidario para todos los colombianos.