El Congreso de la República archivó el miércoles 19 de junio la ley estatutaria de educación, justo un día antes de finalizar el periodo legislativo.
La decisión se tomó después de intensas jornadas de protestas y plantones organizados por la Federación Colombiana de Educadores (Fecode). Los docentes argumentaron que la reforma carecía de la debida ilustración y no beneficiaba a la educación pública ni a los educadores, lo que generó un amplio rechazo en el gremio.
La reforma, impulsada por el Gobierno, tenía como objetivo mejorar la cobertura y calidad del sistema educativo colombiano. Sin embargo, el proyecto fue criticado por diversas organizaciones y figuras del ámbito educativo, que consideraban que los cambios propuestos no garantizaban una verdadera mejora en el sector.
Fecode, en particular, lideró una serie de movilizaciones para expresar su descontento, logrando que la iniciativa finalmente no fuera discutida en el Senado.
En respuesta a la decisión del Congreso, el Ministerio de Educación anunció que próximamente presentará una nueva hoja de ruta para la siguiente legislatura.
A pesar de la suspensión del proyecto, la movilización de los docentes fue vista como una victoria para la educación pública. La representante de Fecode expresó su satisfacción y agradeció a los maestros por su lucha en defensa de sus derechos y la calidad educativa.
El presidente del Senado, Iván Name, confirmó que la reforma no será agendada ni discutida, lo que marca un punto final a este controvertido proyecto.
Los maestros, a través de su sindicato, han dejado claro que seguirán vigilantes ante cualquier nueva iniciativa legislativa, reafirmando su compromiso con la defensa de una educación pública de calidad en Colombia.
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