Dólar a la baja, bolsa en ascenso y PIB al alza: Colombia consolida su recuperación

Colombia ha experimentado un notable crecimiento económico en el primer trimestre de 2025, con una proyección del 2,3% en su Producto Interno Bruto (PIB), según la Encuesta de Opinión Financiera de Fedesarrollo.

Este crecimiento supera el 1,7% registrado en 2024 y refleja una recuperación gradual de la economía nacional. Los analistas atribuyen este avance a una combinación de factores internos, como la estabilidad política y la confianza en las instituciones, así como a condiciones externas favorables, como la baja en los precios del dólar y el fortalecimiento del peso colombiano.

El peso colombiano ha registrado una apreciación del 4,67% frente al dólar en 2025, ubicándose como la tercera moneda más fuerte a nivel global, según Bloomberg. Solo el rublo ruso y el real brasileño han superado este desempeño.

Este fortalecimiento se debe, en parte, a la baja actividad en los mercados durante las festividades de diciembre y a la percepción positiva del mercado frente al panorama político colombiano. La apreciación del peso ha mejorado el poder adquisitivo del país en importaciones, lo que ha beneficiado a los consumidores y ha contribuido a la contención de la inflación.

En el ámbito bursátil, el Colcap, el principal indicador de la bolsa de valores de Colombia, ha registrado un rendimiento del 20,14% en dólares en lo que va del año, situándose como el tercer mejor desempeño a nivel mundial. Este crecimiento contrasta con los modestos avances de los principales índices de Wall Street, como el Dow Jones (4,71%) y el S&P 500 (3,96%).

El dinamismo del mercado colombiano se explica por una combinación de factores locales, como la estabilidad macroeconómica, y la ausencia de medidas arancelarias inmediatas por parte de Estados Unidos, lo que ha impulsado la confianza de los inversionistas.

La tasa de cambio del dólar en Colombia ha mostrado una tendencia a la baja en 2025, alcanzando un mínimo de 4,085 pesos colombianos (COP) en febrero. Esta depreciación del dólar ha sido impulsada por la fortaleza del peso y por factores externos, como la estabilidad en los mercados internacionales.

Los analistas esperan que la tasa de cambio cierre el año en 4,300 COP, lo que representa una disminución frente a las proyecciones anteriores. Esta tendencia ha beneficiado a los importadores, pero también ha generado preocupaciones entre los exportadores, que enfrentan mayores desafíos para mantener su competitividad.

En cuanto a la política monetaria, el Banco de la República ha mantenido estable la tasa de interés en 9,50% durante enero de 2025, con expectativas de que se reduzca gradualmente a lo largo del año.

Los analistas proyectan que la tasa de intervención se ubicará en 7,75% para diciembre de 2025, lo que refleja un entorno de mayor estabilidad económica. Además, la inflación, que se situó en 5,22% en enero, se espera que disminuya a 4,26% para finales de año, aunque aún por encima del rango meta del Banco de la República (2%-4%).

En resumen, el crecimiento económico de Colombia en 2025 ha sido impulsado por una combinación de factores internos y externos, incluyendo el fortalecimiento del peso, la baja del dólar y el dinamismo del mercado bursátil.

El peso colombiano, con una apreciación del 4,67%, se ha posicionado como una de las monedas más fuertes del mundo, reflejando la confianza de los mercados en la economía nacional. Si se mantienen las condiciones de estabilidad política y económica, Colombia podría consolidarse como un destino atractivo para la inversión extranjera y continuar su senda de crecimiento en los próximos años.