Las autoridades sanitarias del departamento de Caquetá han confirmado el primer caso de fiebre amarilla en el municipio de Doncello.
El paciente, inicialmente diagnosticado con dengue, reside en la vereda La Trinidad y fue remitido al Hospital María Inmaculada. Afortunadamente, estaba inmunizado contra la fiebre amarilla y se encuentra estable.
Las autoridades han subrayado la importancia de la vacunación para prevenir esta enfermedad potencialmente mortal.
Ante este caso, las autoridades municipales de Doncello han convocado un comité de gestión de riesgo para planificar medidas que eviten la propagación de la fiebre amarilla en la localidad.
Se recomienda a la población utilizar repelente, ropa que cubra la piel y toldillos para evitar el contacto con los mosquitos transmisores. Además, el departamento del Huila también está en alerta debido a la aparición de nuevos casos, con especial vigilancia en siete municipios prioritarios.
La fiebre amarilla es una enfermedad viral aguda y hemorrágica, transmitida por la picadura de mosquitos infectados. Los síntomas incluyen fiebre, dolor de cabeza intenso, dolores musculares, fatiga, náuseas y vómitos, y suelen aparecer de tres a seis días después de la picadura.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que cada año se reportan 200.000 casos de fiebre amarilla y 30.000 muertes en todo el mundo, lo que resalta la importancia de mantenerse vacunado y seguir las recomendaciones de prevención.
Aquí guía para prevenir fiebre amarilla:
- Vacunación: La vacuna contra la fiebre amarilla es altamente efectiva y proporciona inmunidad de por vida en la mayoría de las personas. Es especialmente importante para quienes viven en áreas endémicas o viajan a ellas. Algunos países requieren prueba de vacunación para ingresar.
- Control de mosquitos: Reducir la población de mosquitos y prevenir las picaduras es crucial. Esto se puede lograr a través de:
- Uso de repelentes de insectos.
- Uso de ropa de manga larga y colores claros.
- Instalación de mosquiteros en puertas y ventanas.
- Eliminación de criaderos de mosquitos, como recipientes con agua estancada.
- Medidas comunitarias: Las campañas de salud pública pueden ayudar a educar a la población sobre la importancia de la vacunación y las medidas de control de mosquitos.
- Viajes responsables: Las personas que viajan a áreas endémicas deben asegurarse de estar vacunadas y tomar medidas para evitar las picaduras de mosquitos.
Al combinar estas estrategias, es posible prevenir la fiebre amarilla y reducir su propagación.